Este año dos de las personas voluntarias de Chernobileko Umeak, Enrique Angulo y Belén Ugarte, cumplen 20 años como personas voluntarias trabajando por que las niñas y niños afectados por la catástrofe nuclear de Chernobil puedan salir de la zona contaminada con el objetivo de mejorar su salud.
Como reconocimiento a su labor, Enrique y Belén fueron sorprendidos durante el pasado Campamento de los Valores con un pequeño homenaje que las niñas y niños y todas las y los monitores del campamento habían organizado en secreto. Así, fueron sorprendidos con una gran tarta y una libreta en la que cada una de las y los menores había escrito una dedicatoria. Del mismo modo, en el acto les dedicaron las siguientes palabras:
La vida es un largo viaje y vosotros hace 20 años que formasteis un tren en el que cada año traéis a niñas y niños para llenarles de salud, ilusión, y alegría- Por todos ellos y por todos los que nos hemos ido subiendo a este tren, un millón de gracias.
Desde aquí, queremos aprovechar para agradecerles también su labor y extenderlo a todas y cada una de las personas voluntarias así como familias de acogida que trabajan por construir un futuro para todas estas niñas y niños. Porque Chernobil sigue vivo y necesita nuestra ayuda.
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